¿Qué pasará mañana?

Michael A. Galascio Sánchez (Licenciado en Ciencias Políticas y doctorado en Psicología de la Salud y Clínica)

• Este mes, un grupo de poderosos banqueros se reunirá primero en Indonesia, luego Copenhague y finalmente Canadá para decidir que sucederá con la economía mundial. ¡Y no hablo del grupo Bilderberg! Estos banqueros son los verdaderos dueños del mundo

Hace unos años, redacté un artículo con el mismo título. Hacía referencia al futuro del sistema político global en gestación (Nuevo Orden Mundial). Se trata, de información que tenía desde hacía más de 30 años, aunque cuando era joven, no fui capaz de articularlo.

Para mi desconcierto, el presentador de radio que lo recibió pensó que estaba desequilibrado. Pues utilicé una frase con la consideré que muchos podrían relacionarse. La extraje de una colección esotérica de los años sesenta y setenta, editada por Plaza & Janes, que forma parte mi biblioteca privada que es bastante amplia. Estaba convencido que por la experiencia del locutor como "proof-reader" y escritor, podría captar mi intención. Sin embargo, cometí una grave equivocación, por motivos que hoy conozco perfectamente.

"No obstante, reconozco que es difícil hablar sobre estos temas en la sociedad actual porque el ciudadano de a pie piensa que es libre. A muchos les asusta pensar que existen una serie de factores que rigen la mayor parte de nuestros actos, de nuestros pensamientos y hasta de nuestros conceptos generales y abstractos respecto al modo de enfocar la realidad del mismo cosmos y hasta nuestra propia existencia".

Sin embargo, el tiempo me está dando la razón. La consciencia de los ciudadanos está despertando y se están dando cuenta de lo que va a suceder. Por ejemplo, la declaración de Nigel Farage parlamentario británico denunciando en el Parlamento Europeo al Nuevo Orden Mundial que pretende transferir varios "trillones" de divisas de EE.UU., Canadá y países europeos hacia Bélgica en donde está el verdadero poder global.

La economía mundial que se desmorona. Según el financiero billonario Jim Rogers, en Inglaterra la libra se hundirá, Islandia va a realizar un referéndum para ver si paga o no, al Fondo Monetario Internacional. Grecia y España siguen agonizando económicamente. Mientras tanto, los "teóricos de la conspiración" no dejan de hablar del HAARP (The High-frequency Active Auroral Project) y los Chemtrails. Mientras tanto, Herman Van Rompuy sigue ganando poder dentro de la UE y los norteamericanos están comenzando a comprar alimentos deshidratados con una caducidad de 27 años(http://www.efoodsdirect.com/). ¿Locura? ¡No lo sé! ¿Previsión? ¡Tal vez!

Este mes, un grupo de poderosos banqueros se reunirá primero en Indonesia, luego Copenhague y finalmente Canadá para decidir que sucederá con la economía mundial. ¡Y no hablo del grupo Bilderberg! Estos banqueros son los verdaderos dueños del mundo. Con toda esta confusión, todo este caos, con mucha probabilidad el sistema financiero que conocemos hoy, caerá. Los habitantes del planeta deberán conformarse con un nivel de vida más bajo y los que no, probablemente presenciaremos un conflicto global. Se preguntarán, ¿por qué decir todo esto ahora? Sencillamente, porque cuando ocurren grandes desgracias, grandes tragedias como las que están sucediendo y sucederán, las personas están más receptivas. No están dispersas en las distracciones del mundo moderno. En ésta situación de crisis pueden suceder dos cosas: Que los ciudadanos se den cuenta de lo que acontece y se revelen en contra del pequeño grupo que les quiere controlar o arrodillarse para recibir al Nuevo Orden Mundial (Verde), cuya misión es destruir la sociedad industrial para bajar el nivel de vida y convertir a la población en esclavos de una pequeña elite. Sin embargo, ¿cómo hemos llegado hasta aquí? La formula es sencilla. "Los condicionamientos que nos han creado y que siguen generando los núcleos sociales de presión han conseguido privar al Ser humano de su expansión cognoscitiva. En ésta vía, la única manera de vencer la manipulación es adquiriendo conciencia de una nueva realidad y no dar nuestro consentimiento, ni siquiera tácito, para los planes hegemónicos de otros"

Hay una cita casi profética de Dostoievski, quién después de encontrase cara a cara con la muerte y sufrir un largo período de cautividad, pudo expresar con lucidez en su obra "Los Posesos", lo que está transpirando en nuestra sociedad global: "Pero una o dos generaciones de vicio son ahora esenciales; de un vicio monstruoso, abyecto, por el que el hombre se transforma en un reptil repugnante, cruel y egoísta. ¡Esto es lo que necesitamos! Y además un poco de "sangre fresca" para que nos vayamos acostumbrando a ella. Proclamaremos la destrucción... ¿Por qué ejerce tal fascinación esa idea? Encenderemos fuegos... Lanzaremos leyendas. Todos los "grupos" viles serán útiles. De esos mismos grupos escogeré hombres tan vehementes que no vacilen en matar y queden además agradecidos por el honor de haberlo. ¡Y también habrá una sublevación! Se producirá un trastorno como el mundo no ha visto jamás..." El autor, escribió esa obra en 1872. Sin embargo, nunca he leído algo tan actual.

Para consuelo nuestro y de los oprimidos, lo crean o no, ésta elite que descansa en el trono del Mundo, no sabe que ha estado trabajando sobre un constructo vibracional perverso que pronto verá su fin. Cuando este ciclo cambie, ellos se derrumbarán ya que están conectados psíquica y físicamente. Literalmente, desaparecerán de nuestra realidad. Así como en esas historias literarias, una vez destruido el mago perverso, también se destruye su castillo.

Por último, hay ideas, inspiraciones, intuiciones e iluminaciones tan elevadas y nuevas que ni siquiera un genio intenta traducirlas adecuadamente a nuestro lenguaje y las escasas veces que un gran hombre ha intentado esta traducción nadie ha sabido comprenderle. Hay, finalmente, verdades tan amargas tan crueles, tan espantosas, en torno a las cosas del mundo y de la vida humana, que aquéllos, desgraciados, que las tienen clarísimas en su mente, no hablan de ellas a ningún ser vivo por un sentimiento de humana compasión y de cristiana misericordia. Su silencio, como el del niño espartano que escondía bajo su túnica la zorra enfurecida, está formado de gemidos reprimidos y de suplicios escondidos.

http://www.revistatara.com/